El insulinoma es un tumor neuroendocrino raro, generalmente benigno, que se origina en las células beta del páncreas y se caracteriza por la hipersecreción autónoma de insulina. Esto conduce a episodios de hipoglucemia, especialmente en ayuno. Representa la causa más frecuente de hipoglucemia endógena en individuos sin diabetes.
La mayoría de los insulinomas son esporádicos, aunque un pequeño porcentaje está asociado con neoplasias endocrinas múltiples tipo 1 (MEN-1). Su diagnóstico y tratamiento temprano son esenciales para prevenir complicaciones severas y mejorar la calidad de vida del paciente.
Epidemiología
● Incidencia: se estima en 1-4 casos por millón de personas al año.
● Edad de aparición: comúnmente entre los 40 y 60 años.
● Distribución: aproximadamente el 90% son tumores solitarios, benignos y esporádicos. El 10% restante puede ser maligno o asociado con MEN-1.
Clínica
El insulinoma se presenta con síntomas de hipoglucemia derivados de la tríada de Whipple:
- Hipoglucemia confirmada: glucosa plasmática <55 mg/dL.
- Síntomas neuroglucopénicos: confusión, visión borrosa, pérdida de conciencia, convulsiones.
- Resolución rápida de los síntomas con la administración de glucosa.
Otros síntomas incluyen:
● Palpitaciones, diaforesis y temblores (por activación adrenérgica).
● Aumento de peso debido al consumo excesivo de carbohidratos para aliviar los síntomas.
Diagnóstico
El diagnóstico del insulinoma se basa en la confirmación bioquímica y la localización del tumor.
A. Confirmación Bioquímica:
● Prueba de ayuno supervisado (72 horas): Permite documentar hipoglucemia espontánea con niveles elevados de insulina.
○ Insulina plasmática ≥3 μU/mL.
○ Péptido C ≥0,6 ng/mL.
○ Relación insulina/glucosa ≥0,3.
○ Ausencia de sulfonilureas en sangre.
B. Localización:
● Imagenología:
○ Ultrasonido endoscópico (USE): alta sensibilidad para detectar lesiones pequeñas (<2 cm).
○ Tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM): Útiles para evaluar extensión y descartar malignidad.
● Estudios funcionales:
○ Tomografía por emisión de positones (PET) con galio-68-DOTATATE para insulinomas malignos o no localizados.
● Prueba intraoperatoria: palpación y ultrasonido intraoperatorio para confirmar la localización.
Tratamiento
El tratamiento curativo del insulinoma es quirúrgico. Las opciones se detallan a continuación:
Intervención | Detalles |
Resección quirúrgica | Enucleación para tumores solitarios y pequeños. |
Pancreatectomía distal si el tumor está en la cola o múltiples lesiones. | |
Manejo médico prequirúrgico | Dextrosa intravenosa para corregir hipoglucemias graves. Diazóxido: inhibe la secreción de insulina en casos no resecables o temporales. |
Tratamiento para la malignidad | Quimioterapia con estreptozotocina y doxorrubicina en casos avanzados. Terapias dirigidas con somatostatina (análogos) o inhibidores mTOR como everolimus. |
Promoción y prevención
Aunque no existen medidas preventivas específicas para el insulinoma, el diagnóstico temprano es clave. Se recomienda:
- Educación médica: considerar insulinoma en pacientes con hipoglucemia recurrente inexplicada.
- Seguimiento familiar: evaluar a familiares si existe sospecha de MEN-1.
- Evitar complicaciones: reconocer y tratar episodios de hipoglucemia para prevenir daño neurológico permanente.
Para recordar:
El insulinoma, aunque raro, debe ser considerado en el diagnóstico diferencial de la hipoglucemia recurrente. Su manejo requiere un enfoque multidisciplinario que incluya diagnóstico bioquímico, localización precisa y tratamiento quirúrgico o médico según el caso. La detección oportuna y un tratamiento adecuado mejoran significativamente los pronósticos.