¿Alguna vez has escuchado a un paciente solicitando una consulta con un médico en específico? ¿Te has preguntado cuál es el motivo? Aunque hay médicos con grandes conocimientos y saberes médicos, muchas veces este aspecto pasa a un segundo plano, ya que el paciente termina eligiendo y prefiriendo al médico que lo escucha y que más que un diagnóstico le da una solución a sus preocupaciones y dudas y lo hace sentir importante.
Cada persona es un mundo distinto y es aquí donde muchos de nosotros podemos hacer la diferencia escuchando los síntomas, miedos y preocupaciones de nuestros pacientes y transformando una consulta cualquiera en una verdadera experiencia de entrega. Muchas veces el día a día nos hace olvidar de cosas tan simples que hacen de nuestra profesión algo maravilloso y, sin duda, la escucha activa es una de las características que más se ha perdido en nuestro gremio.
Por esta razón, hoy queremos destacar la importancia de la escucha activa hacia nuestros pacientes y recordar que, aunque tengamos largas jornadas y muchos pacientes por atender, cada uno de ellos merece lo mejor de nosotros. Por eso, te compartimos los siguientes tips para que transformes tus consultas por medio de la escucha activa:
1. Salúdalos.
2. Préstales atención genuinamente.
3. Haz las preguntas necesarias.
4. Evita hacer juicios de valor.
Salúdalos: nosotros estamos acostumbrados al consultorio. Sin embargo, para los pacientes puede ser un momento de angustia y, por este motivo, es importante generar confianza desde el primer momento saludándolos de manera cordial y rompiendo el hielo para tener una mejor consulta.
Préstales atención genuinamente: para esto, lo mejor que puedes hacer es alejarte un rato del computador y es que sabemos que escribir la historia clínica es muy importante, pero trata de hacerlo en los momentos adecuados. Cuando un paciente te está hablando sobre sus síntomas es importante mirarlo, escucharlo e interactuar con él. Esta es una parte fundamental para generar confianza e incluso para brindar un buen diagnóstico y es que el lenguaje corporal también tiene mucho por decirnos.
Haz las preguntas necesarias: en la mayoría de ocasiones es necesario realizar preguntas para guiar de la mejor manera la descripción del paciente sobre sus síntomas y, por lo tanto, poder brindar un diagnóstico mucho más acertado. No obstante, debemos evitar las preguntas repetitivas e innecesarias que puedan generar una sensación de desinterés o incomodidad en nuestros pacientes. Recuerda que la escucha activa nos ayuda a saber perfectamente qué preguntar y así podremos optimizar al máximo el tiempo de consulta.
Evita hacer juicios de valor: Recuerda que tu papel como médico es atender el malestar o dolencia que presentan tus pacientes. En ese sentido, una parte importante de saber escuchar y ser un profesional de la salud es evitar juzgar a tus pacientes. Tus pacientes notarán este aspecto y ayudará a su honestidad y confianza.
Ahora que ya conoces algunos tips para mejorar la escucha activa con tus pacientes, ponlos en práctica ¡eso te hará un mejor médico cada día! Comparte con tus amigos este blog y ayúdalos a que ellos también se conviertan en los médicos que el mundo necesita.
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